Hace poco, el historiador del cine y filólogo, David Felipe Arranz, comentaba en un conocido programa de televisión “que los géneros híbridos no se les dan bien a los críticos”. Yo a esto añadiría la coletilla de los espectadores, que cada vez están peor formados y “descriteriados”. Pero tampoco vamos a entrar en este debate ahora, aunque sí que sirve para ilustrar lo que posiblemente suceda con esta película en las próximas semanas. Ojalá me equivoque y funcione bien, pero me temo que con “Morbius”, Marvel y Sony, en esta ocasión, no han realizado una producción típica de superhéroes (como ha sucedido con el nuevo y magnífico Batman, recientemente). Esto puede suponer dos reacciones, por desgracia, extremas. O bien gusta muchísimo, o bien, suscita el rechazo unánime tanto de la crítica como del público. Porque Morbius no es un héroe, en todo caso puede ser súper por los poderes que tiene, pero de héroe tiene bastante poco.
La historia empieza en una zona perdida de Costa Rica, en la entrada de una cueva, junto a un paraje verde salvaje y bello. Un helicóptero se acerca, llevando en su interior al doctor Michael Morbius (Jared Leto), quien se dispone a coger unos cuantos ejemplares de murciélagos vampiros típicos de la zona. Más adelante, vemos a Morbius en un rápido flashback, siendo un niño. En él se nos cuenta que padece una terrible y extraña enfermedad, y que es un joven de altas capacidades. Su médico, Nicholas (Jared Harris) le ayudará a estudiar, y se convertirá en un prominente biólogo, también con la ayuda inestimable de su amigo Lucien (Matt Smith), hijo de familia rica. Michael desarrollará un suero con el que vencer esa complicación que se da en su sangre…con terribles consecuencias.
Los guionistas del film han realizado un hábil juego situando la fuente primigénia del personaje en los relatos góticos. Morbius es un científico como pudiera serlo el Doctor Jekyll, que también buscaba una cura para un mal. En todo momento le vemos luchando contra sí mismo y sus ganas de consumir sangre. Aparte de que la concepción del personaje tiene lugar en un barco, en medio del mar; un buque llamado Murnau (en clara referencia al histórico director de la obra maestra del cine mudo Nosferatu, que en su día supuso una adaptación apócrifa de Drácula), y no olvidemos que Drácula viaja a Europa en un barco, donde causa estragos; pero claramente la cinta contiene algunos guiños al primer Blade de Wesley Snipes y se enmarca en un juego de géneros, desde el terror más clásico pasando por el thriller científico y la acción; una acción muy sencilla, con unas pocas secuencias de efectos digitales bien hechas. Todo esto en un metraje que no llega a las dos horas, convirtiéndola en una cinta asequible y que remarca el carácter introductorio de la misma. Jared Leto logra un retrato muy atractivo del personaje y una buena perspectiva de cara al futuro. Otra cosa es el veredicto que asigne el público generalista sobre una cinta que es bastante modesta en sus planteamientos, pero que resulta en una propuesta muy refrescante dentro de este género.
En fin, Morbius es muy disfrutable, se pasa en un suspiro y goza de una gran virtud: marcar un punto y aparte en una franquicia que necesita más riesgo, aunque sea a costa de perder a ese público más generalista.
Un comentario
Apenas ayer conocí esta página gracias a una reseña que busqué sobre el Cuarto Jinete (por cierto, por fin me animé a pedirlo hasta México y la próxima semana me llegará el cuarto), y debo decir que con esta reseña me han ganado como fiel lector a partir de ahora.
A mí me gustó mucho esta peli, y me sentí mal por ella de que le fuera mal en taquilla y en crítica, ya que disfruté mucho ver después de tantos años una película de Marvel sin chiste.
No niego que esta película usa la misma fórmula que Venom (cambiando el humor ahora por drama), pero eso no le quita que sea una trama entretenida y como dices, una apuesta arriesgada en un mercado dominado por superhéroes bufones.
Pero bueno, el público ya habló y al parecer quieren seguir teniendo superhéroes ridículos y películas con un chiste cada minuto. Ni hablar.
Saludos y mucho éxito con el blog!