Escribo estas líneas sabiendo que, pese a que Disney ya nos ha avisado del tremendo éxito que ha tenido Vengadores: Endgame en taquilla (los números son impresionantes), no todos habrán visto la película, por lo tanto, no voy a hacer ningún spoiler.
Lo que sí que haré, es mencionar algunas cosas a nivel de guión y apartado técnico para argumentar mis impresiones acerca de la película, pero sin revelar nada importante así que, ¡podéis leer con tranquilidad!
Vengadores Endgame es el fin de una era. Diez años de películas que empezaron con Iron Man en solitario, y que ahora, tras el ya de por si destacado trabajo de Infinity War, ha reunido a una auténtica familia que va a marcar a varias generaciones.
¿Qué vendrá a partir de ahora? Solo el tiempo nos lo dirá. Por lo pronto hay anuncio de más Doctor Extraño, más Black Panther…y a mí, personalmente me surge una pregunta: ¿Tendrán estos personajes el mismo eco, el mismo impacto emocional que han supuesto estos diez primeros años de vida de Marvel Studios? (No nos olvidemos que Marvel, en el fondo, lleva más años haciendo películas, los X-MEN, el primer Hulk, Daredevil, Spiderman)
Vengadores… Reunidos… XD |
Tras esta particular digresión que lanzo a los lectores, toca entrar directamente en el Fin del Juego que nos muestra Vengadores Endgame, el capítulo final de este viaje apoteósico que me ha dejado sonrisas y también lágrimas, mucha épica (el ingrediente que Marvel hacía tiempo que no tenía) y desde luego ganas de una pausa, de un tiempo de descanso, y ganas de más aventuras, pero esta vez sin saturar demasiado.
Todos en cierta medida sabemos lo que ocurre en este film, el argumento: La mitad de la población del universo destruida, Thanos en busca y captura, y la necesidad de obtener una mínima oportunidad para reparar el daño causado.
Iron Man, Thor, Viuda Negra, Hulk y Ojo de Halcón se reúnen de nuevo para buscar al genocida de Titán y vengar a los caídos. Más allá de esto, la cinta consigue hacer un homenaje, y al mismo tiempo plantear algo nuevo para el futuro. Porque en el conjunto el film es eso, un tributo a sí mismos y a lo que han sido estos diez años de aventuras. ¿Cómo es esto? Tendréis que ver la película para saberlo. Hay grandes momentos, como pasaba en Infinity War, escenas de mucha épica, y un buen cierre de tramas principales, con sorpresas en algunos personajes.
Thanos pensaba que se iba a poder “jubilar” e irse de rositas… pero sobre él caerá la justicia de Los Vengadores. |
Ahora bien, y es aquí donde entra lo negativo, al final, la esencia de la película se vuelve un poco contra ella misma. Me explico. Como sucedía en la anterior, juntar a tantos personajes implica que cada uno debe tener su espacio y su momento de gloria. Pues al final, creo que hay más secundarios que principales. Esto puede descompensar un poco a nivel argumental, pero tampoco es que sea un hándicap que impida el disfrute de la película. Eso sí, creo que a Marvel y Disney se les está yendo un poco de las manos el asunto del marketing y las cuotas de poder en relación a los personajes femeninos y, me refiero en concreto a cierto personaje de reciente incorporación que, una vez más demuestra mi teoría de que es superfluo y no sirve para nada, además de que provoca uno de los momentos más ridículos de toda la saga.
Independientemente de todo esto, VENGADORES: ENDGAME es una fiesta para los sentidos. Se disfruta enormemente. El metraje de tres horas, lejos de parecer excesivo, viene bien y es lo que garantiza precisamente que el guión se cohesione mejor. Ha sido un placer acompañar a estos personajes durante diez años y espero que el futuro nos depare algo sino mejor, que por lo menos esté a la altura.