Blackwood: Orfanatos, fantasmas y arte [CRITICA]

Gracias a Sensacine y De Fan a Fan pude asistir al prestreno de Blackwood que se ha realizado una semana antes del estreno de este film.

Blackwood llega a España de la mano de eOne y es la adaptación cinematográfica de la novela corta de Lois Duncan llevada a cabo por el director español Rodrigo Cortés en una coproducción estadounidense española, gracias al estudio de Crepúsculo y los Juegos del Hambre. De primeras admito que asistía a la proyección del film con el contenido del libro en la cabeza, una novela corta de poco más de doscientas páginas que en España ha editado Nocturna, la última escrita por la autora responsable de otras historias de terror juveniles como Se lo que hicisteis el último verano.

Debido a esto tengo que advertir nada más empezar: los que hayan leído la novela no se van a encontrar una adaptación satisfactoria de la misma. Por lo que solo sugiero el visionado del film para aquellos que vayan a él totalmente vírgenes de contenido. Aun así, la cinta contiene unas cuantas bondades de las que vamos a hablar ahora, porque evidentemente no todo es perfecto en esta vida, y hay que hablar de las cosas con imparcialidad y saber valorarlo todo en su justa medida. ¿Qué tiene de positivo esta visión particular de Blackwood? Pues la atmósfera, la estética, una Uma Thurman realizando un buen papel como Madame Duret, y algunas escenas propiamente musicales que merece la pena destacar (la partitura de Victor Reyes ayuda a ello).

Uma Thurman

Desgraciadamente, la mano de la autora de Crepúsculo, Stephanie Meyer, hace estragos al posarse sobre esta película, al igual que la labor de los dos guionistas (¿De verdad hace falta la mano de dos escritores para adaptar una novela juvenil corta?)que, sinceramente, no logran sacar lo que es realmente importante del relato: ¿De dónde viene la inspiración? ¿Cómo actúan las musas con los creadores? ¿Cómo es capaz el ser humano de crear belleza en la música, en la literatura, en el dibujo o la pintura? Preguntas que glosan la esencia del mismo.

Debido a ello, Blackwood se convierte en un espectáculo típicamente juvenil de fantasmas, que abusa de estereotipos y clichés varios del género. Mientras que en el libro, el perfil de las chicas que asisten al internado es completamente distinto, aquí se nos muestra a las típicas adolescentes problemáticas. ¿Por qué siempre tienen que serlo? En fin, más allá de algunas escenas remarcables, la película contiene sustos fáciles y un tono demasiado juvenil que recuerda a los vampiros descafeinados de Meyer.

En definitiva, Blackwood ofrece un resultado pobre de un relato que habla de cosas mucho más profundas y al que se ha vaciado con la pretensión de vender más. Os dejo aquí el tráiler y la sinopsis oficial de esta película que se estrena en cines el 3 de agosto.

Sinopsis oficial de Blackwood

Cinco adolescentes problemáticas se ven obligadas a acogerse a un programa experimental de enseñanza impartido por la enigmática Madame Duret (Uma Thurman) en el internado Blackwood. Pronto empiezan a mostrar talentos singulares que no sabían que poseían, y a tener extraños sueños. Visiones. Lagunas de memoria. Cuando la frontera entre realidad y sueño comienza a hacerse demasiado difusa, todas comprenden al fin el motivo por el que han sido llamadas a Blackwood. Aunque ya puede ser tarde…