Siendo niño, en algunas de las noches en las que más me costaba dormir, dejaba que mi imaginación se desatase. Con los ojos cerrados, me imaginaba protagonista de algún cuento tipo “La historia interminable” y volando a lomos de un dragón me encontraba con mis amigos a los que llevaba a vivir mil y una aventuras. Con la imaginación completamente excitada, abría los ojos y allí estaba, justo enfrente de mi cama, un monstruo terrible, deforme, con sus ojos amenazantes dirigidos directamente hacia mí.
Aterrorizado, deslizaba la mano hasta el interruptor de la lámpara de la mesilla y encendía la luz para ver que frente a mi cama, el monstruo desaparecía y en su lugar quedaba una silla con la mochila del colegio enterrada en un montón de ropa. No podía creer lo rápido que se movía y cómo le había dado tiempo a desaparecer mientras mis ojos se acostumbraban a la claridad. Más tranquilo después de mirar en todos los armarios, volvía a la cama sin quitarle ojo a la silla, apagaba la luz y me envolvía entre las sábanas como si estuvieran hechas de los brazos de mi padre, hasta que me quedaba dormido.
“Carahueca” es un monstruo que se mete en las habitaciones y rapta a los niños para robarles la cara y así poder rellenar su vacío. Es capaz de esconderse en el armario, de trepar por la ventana y ser la pesadilla de dos niños, Juan, un madrileño de clase humilde que vive con su madre y Mia, una bonita niña londinense de familia feliz. La intromisión de ese monstruo en sus vidas afecta a las vidas de las familias, la madre de Juan (Pilar López de Ayala) decide ignorarlo como si se tratara de una pesadilla y el padre de Mia (Clive Owen) se enfrenta al monstruo con sus puños para proteger a su hija.
No penséis que estáis ante una película de terror o una de esas americanadas que dan un susto por escena, “Intruders” es un thriller psicológico que desarrolla dos historias paralelas que sólo se unen en un giro final completamente inesperado. Juan Carlos Fresnadillo maneja el suspense en las escenas interiores con una atmósfera claustrofóbica de forma excelente, transmitiendo inquietud al espectador, con planos cortos y primeros planos, aunque cayendo en algunas ocasiones en tópicos de las películas de este género. Técnicamente impecable, quizá se eche en falta un poco de ritmo en algunos tramos intermedios del filme, dejando el resultado en un bien alto, en vez de sobresaliente.
El reparto lo encabeza Clive Owen en el papel de hombre corriente enfrentándose a hechos que le superan, de forma notable, sin embargo su mujer, Clarice van Houten, resulta sólo discreta. Por el lado español tenemos a Pilar López de Ayala como madre de Juan, cumpliendo perfectamente su cometido, a Daniel Brühl, como joven cura deseando ayudar a una madre soltera y el cameo estelar de Héctor Alterio, como anciano sacerdote exorcista .
La cinta se disfruta, no os dejéis convencer por un par de “peros”. Asistimos a su estreno en España como película inaugural del festival internacional de cine de San Sebastián y nos dejó muy buen sabor de boca.
Ficha Técnica
Titulo: Intruders (Intrusos)
Director: Juan Carlos Fresnadillo
Guión: Nicolás Casariego y Jaime Marqués
Intérpretes: Clive Owen, Carice van Houten, Daniel Brühl, Kerry Fox, Ella Purnell, Pilar López de Ayala
Duración: 100 m.
Año: 2011
País: Coproducción España-EEUU-GB
2 respuestas
Pues hoy la he visto, "fité" tú
di algo mas Isackender.. que te parecio o algo parecido