Aquella vez que me reencarné en Yamcha, de Dragon Garrow Lee [RESEÑA]

Aunque viví en primera persona el fenómeno Dragon Ball (y que probablemente es una de las razones por las que me encuentro detrás de un teclado), no paro de sorprenderme de que la obra de Akira Toriyama siga dando pie a nuevas historias.

Si bien es cierto que ninguna editorial quiere rechazar la oportunidad de explotar al máximo a sus personajes (que se lo digan a Marvel o a DC que llevan 80 años haciéndolo), es algo que en el mundo del manga no es tan habitual, y aunque Dragon Ball se ha mantenido en boga gracias a las series animadas (recordad el caso de Dragon Ball GT que carece de manga o de Dragon Ball Super que ha dado la vuelta a la tortilla publicándose antes el anime que el cómic e inspirando historias para el videojuego Dragon Ball Heroes), siguen apareciendo productos derivados que llaman la atención de los fans.

En el caso de “Aquella vez que me reencarné en Yamcha”, un pequeño tomo publicado en España por Planeta Cómic y que viene firmado por un tal Dragon Garrow Lee, nos encontramos con una especie de parodia que utiliza la metaficción para narrarnos la historia de un chico, fan empedernido de Dragon Ball, que tras un accidente (una caída) se despierta como Yamcha, el personaje de Akira Toriyama.

Así comienza Aquella vez que me reencarné en Yamcha, con un chico que sufre un accidente por prestar demasiada atención a las chicas.

La obra, que comienza con un estilo de dibujo muy diferente al de Dragon Ball, cambia radicalmente de formato en cuanto llegamos al punto de partido de la historia y nos encontramos con que el tal Dragon Garrow Lee consigue hacer suyos algunos de los capítulos más importantes de Dragon Ball. Así pues, conocemos al personaje justo en el momento en el que Yamcha le corta la cola a un joven Goku convertido en gorila gigante.

Dándose cuenta de lo que le ha ocurrido, el prota de la historia aprovecha sus conocimientos de Dragon Ball para, como si de un videojuego se tratara, hacer que su personaje crezca en poder y no muera o lo apalicen como ya se había visto en la historia original.

Sin duda, se trata de una propuesta bastante original y divertida, pero al tratarse de una obra que originalmente se publicó como un extra te tamaño reducido para la web de la editorial que publica Dragon Ball, nos encontramos con saltos temporales y argumentales bastante grandes e incomprensibles.

A diferencia de en la historia original, aquí Yamcha toma la delantera en el enfrentamiento contra Nappa, Vegeta y los Saibamen ¡y con sorprendentes resultados!

En mi caso, he echado en falta ver a esta versión de Yamcha progresar en los campeonatos de Artes Marciales o demostrar más poder en la saga de Piccolo Daimaoh, pero hay que conformarse con verlo interactuar contra Vegeta, Nappa y los Saibamen o con otras pequeñas amenazas “mas asequibles a su nivel”.

Al margen de eso “Aquella vez que me reencarné en Yamcha” es todo un caramelito para los fans de Dragon Ball y sigue demostrando lo viva que está la obra de Toriyama y todo el juego que aun puede dar. ¡No te lo pierdas!