The Walking Dead 5×06 – Consumed: Crítica / Resumen

Los guionistas de The Walking Dead siguen dándonos una de cal y otra de arena semana tras semana, y si el episodio anterior cumplía, este vuelve a dejarnos con un bajón total.

Aquellos que pensábamos que esta semana se culminaría el asunto del destino de Beth nos tenemos que dar con un canto en los dientes, y es que parece que esta temporada los guionistas de The Walking Dead se han empeñado en demostrar que los tráilers que ofrecieron como adelanto de la temporada fueron un anzuelo perfecto en el que hemos picado todos.

Si ya nos la jugaron con el tema de los “cazadores caníbales” de la Terminal, ahora vuelven a hacernos lo mismo con el asunto de Beth y su supuesto rescate a manos de Daryl y Carol, algo que ni resulta así, ni nos parece solvente en su concepción.

Y es que personalmente, este sexto capítulo de The Walking Dead me parece un desagravio a la audiencia del mismo nivel que el episodio del año pasado en el que Beth y Daryl hablaban dentro de una cabaña.

Repleto de flashbacks sobre lo traumático que fue para Carol deshacerse de ciertos infectados en la cárcel y como tuvo que sobrevivir cuando Rick la desterró de la prisión, el capítulo transcurre con paseos de la parejita por toda Atlanta, demostrándonos una vez más que el grupo lleva meses dando vueltas por los alrededores de la ciudad y que la situación allí tampoco era tan grave.

En su afán por seguir a los supuestos secuestradores de Beth (Emily Kinney), Daryl (Norman Reedus) sigue a todo vehículo que lleve una cruz blanca pintada en el cristal de atrás, y tras perderle la pista al vehículo que siguen desde el capítulo tres de esta temporada nos irán ofreciendo un despropósito tras otro.

El primero de ellos nos lleva al centro de protección para víctimas de violencia de género en el que ingreso Carol (Melissa McBride) tras una de las palizas que le propino su marido, y tras abandonar dicho lugar (en el que se encuentran poco zombis), visitarán una especie de oficina de un tipo adinerado en el que reposaran un rato y vislumbrarán una ambulancia que puede aportarles información sobre sus captores.

Al salir de dicho despacho (que está asegurado con unas cadenas por las que pasan sin muchos problemas) se encontrarán con Noah (Tyler James Williams), el chico con el que Beth intento escapar del hospital donde está recluida y que, ni corto ni perezoso les robará las armas y suministros a la supuestamente letal pareja.

Tras ser desplumados por un niño cojo, la siguiente decisión brillante pasa por ir a donde se encuentra la ambulancia siniestrada, la cual está casi a punto de desplomarse por un puente debido a un choque accidental que parece que sufrieron sus anteriores propietarios, tras entrar (sin darse cuenta que la furgoneta esta sacada de un desguace y que para convertirla en ambulancia simplemente le han puesto una camilla en la parte de atrás), se verán acorralados por una cantidad enorme de zombis, teniendo que encerrarse en el vehículo, abrocharse los cinturones y confiar que los zombis les empujen, caigan desde lo alto de un puente y salgan con vida.

Y si… estáis leyendo bien. Este absurdo plan que vuelve a demostrar los delirios de algunos guionistas sirve para que nuestros amigos sobrevivan, y aunque el vehículo está destrozado, tienen la suerte de que ningún zombi les ataque mientras salen de allí, algo sorprendente teniendo en cuenta que algunos de la jauría de arriba han empezado a caer en el vehículo haciéndonos creer que los zombis tienen controlado lo de no acercarse “a los bordes peligrosos”, algo que deducimos del hecho de que solo cuatro muertos vivientes caigan por la barandilla rota del puente a pesar de que arriba se congregaban varias decenas.

A continuación, Daryl y Beth se arrastran hasta lo alto de otro edificio que supuestamente está enfrente del hospital que buscan, y es entonces cuando de nuevo se cruzan con Noah, con el que, tras tener sus más y sus menos, acaban trabando una alianza ya que el joven les cuenta que sabe dónde está Beth y que puede ayudarlos a rescatarlas, algo que no llegaremos a ver ya que Carol tiene la mala suerte de salir a la calle y ser atropellada (¿qué posibilidades había de que ocurriera esto?, suponemos que las mismas que de sobrevivir a un accidente de coche como el que tienen) por uno de los coches de enfermeros / policías del hospital.

Noah indica a Daryl que deje que se la lleve para que la curen, y tras encontrar un coche, ponen camino a la iglesia para solicitar ayuda a Rick y el resto.

Sinceramente, creo que hacía mucho que no veíamos un capítulo de The Walking Dead con tal acumulación de despropósitos, y es que además de mostrarnos infinidad de escenas y comportamientos sin sentido, los guionistas nos toman por tontos con un guion de vergüenza ajena en el que lo único que vale la pena son los minutos iniciales en los que asistimos al flashback de Carol, el resto, pura basura para alargar una temporada que en breve llegará a su descanso habitual.