El Gran Cuaderno: duro y peculiar relato adaptado [Críticas SEFF2013]

Dicen que la vida te da una de cal y otra de arena, y creo que el SEFF, también se apunta a ese carro. ¿Que a que me refiero? Pues a que si ayer, me veía una película (Stray Dogs) que me dejaba completamente “plof” tras más de dos horas de imágenes aburridas, después, pude disfrutar de otro film bastante más destacable, el cual, sin ser del genero que más me gusta (terror, acción y demás títulos “palomiteros”) consiguió satisfacerme en esa jornada (mañana volveré a por mas).

“El Gran Cuaderno“, además de estar en el SEFF, llegara a las pantallas de cine españolas de la mano de Golem Distribucion, y es la adaptación de la novela homónima (supongo que de la primera entrega de la trilogía) de Agota Kristof, que curiosamente, en España, se distribuye como “Claus y Lucas“.

Abandonados por sus padres, y con una abuela que los maltrata y los obliga a trabajar para comer, los protagonistas del film asumirán el mensaje de su padre de hacerse fuertes, y emprenderán un duro entrenamiento para endurecer su cuerpo y espíritu en vista a los tiempos tan duros que corren.

Durante el metraje, seremos testigos de las penurias que viven estos dos jóvenes, acompañándolos en tan terrible periodo histórico que tantas secuelas dejo en la humanidad.

Duro, dramático y muy realista, “El Gran cuaderno“, no escatima en mostrar detalles de las duras condiciones en las que vive la población vecina a Egyik y Masik (“los bastardos“), y a medida que el metraje avanzan, nos irán desvelando detalles de cómo la situación fue empeorando, ya sea por la dureza natural de la época, la falta de alimento, o los conflictos bélicos que acabaron desembocando crímenes tan destacados como el “holocausto nazi contra los judíos“.

Dotado de buen ritmo, una fotografía estupenda y unos interpretes más que solventes para un film tan duro, “El Gran Cuaderno” consigue trasladarnos a aquella época, y nos sobrecoge por la forma de actuar de dos jovencitos, que pese a poder haberse convertidos en dos monstruos, consiguen ser personas decentes en un mundo donde casi todo el mundo se había vuelto loco, algo que se achaca a su necesidad de estar juntos, a la educación que sus padres les suministraron y a la petición de estos de apuntar todo lo que les pasara en un “gran cuaderno”, que se convierte en su diario durante su trágica experiencia.

Para algunos puede resultar un tanto desagradable, pero la verdad, en cuanto a película sobre el holocausto, no creo que sea ni la más fuerte ni la más cruda, y a pesar de que me gusto bastante, creo que el director debería haberse centrado más en algunos aspectos, en vez de correr tanto para desarrollar prácticamente el primer libro al completo, ya que en las dos horas que dura el film, vemos tanto el inicio de la guerra, como su finalización, pasando solo por encima de algunos capítulos mas que destacables de esta dura historia que supongo, será mucho más extensa en los libros en los que se basa la cinta.

Aún asi, resulta muy recomendable.