Reseña de Barracuda Vol.3: Duelo, de Jean Dufaux

La tercera entrega de esta saga de piratas comienza mostrándonos una escena en la que el capitán de «La Loya» sigue en busca del Barracuda. Con ese objetivo, llega a una perdida isla de leprosos donde un antiguo marinero, que abandonó el barco que da nombre a la historia, relata la situación del navío y sus tripulantes. El capitán Blackdog se encuentra encerrado en su camarote custodiando día y noche el magnífico diamante Kashar (que era el objetivo de la expedición) llegando al borde de la locura. No en vano, parece que a esta valiosa piedra la rodea una maldición de la cual Blackdog parece que no va a conseguir escapar… y si lo consiguiera el capitán de «La Loya» lo seguirá de cerca.

Pero volviendo a Puerto Blanco, isla en la que transcurre la mayor parte de la historia, nos reencontramos con Emilio, Raffy y María, quienes ya han asumido que su destino es permanecer en esa isla, ajenos a lo que anteriormente hubiesen pensado y abandonando prácticamente toda esperanza de recuperar sus antiguas vidas, salvo Raffy que aún continúa esperando el regreso del Barracuda con su padre a bordo. Por su parte, Emilio está convencido en vengar la muerte de Flynn a manos del pirata Morkan y mejorará su técnica con la espada para enfrentarse a este terrible enemigo en un duelo del que solo uno podrá salir con vida, sin olvidar que se aprovechará de esa dualidad que le ha protegido hasta ahora, vestirse con ropas de mujer… En cuanto a Raffy y María, continúan con sus idilios amorosos, ajenos a que pronto su apacible felicidad se verá truncada… por una bella prostituta despechada ante el rechazo de Raffy.

Y quizás esto es uno de los detalles que más se pueden destacar de Barracuda 3, pues a lo largo del tomo se plantean nuevas tramas que dan mayor protagonismo a algunos de los personajes secundarios, como es el caso ya mencionado de la joven prostituta, de un nuevo esclavo que «compra» el marido de María, del que se intuye que no se va a quedar de brazos cruzados ante su nueva situación, o el de la gobernadora de Puerto Blanco, de la cual se nos da más información de su «secreto». Además se profundiza más en la bruja Ni-No que viaja a bordo del Barracuda, donde se nos muestra parte de su poder que seguramente tendrá más importancia en futuras entregas de esta historia de piratas, al igual que el resto de hilos narrativos que se han comenzado a plantear. Celos, venganzas, maldiciones, rebeliones, aventura todos esos son los ingredientes que Dufaux sigue añadiendo y mezclando en sus guiones y con los cuales consigue que el lector quede enganchado totalmente a esta historia de piratas nada convencional.

En el apartado gráfico, Jérémy continúa ofreciéndonos bellas imágenes que ilustran más que correctamente el guión de Dufaux. Cabe destacar el buen uso de Jérémy en el color para diferenciar las escenas y transmitir el ambiente de cada una de ellas, llegando en algunos casos a reducir la gama de colores únicamente a tonos cálidos o fríos.

Merece la pena contemplar su trabajo a través de estos vídeos del proceso de creación de alguna de sus páginas, un trabajo admirable y muy detallista:

En Barracuda 3 aparece en portada por primera vez uno de los tres protagonistas principales: Emilio, en la escena cumbre de este tomo. En el cuarto presentará la historia Raffy, por lo que quizás en un quinto tomo veamos a María en portada para completar la aparición del triangulo protagonista. Una de las incertidumbres de esta serie es no poder conocer de cuantos números estará compuesta, pero podemos imaginar, si está teoría es cierta, que al menos podremos disfrutar de dos entregas más. El número 4 será publicado en Francia a finales de 2013, por lo que tendremos que esperar un poco más para poder leerlo en castellano de la mano de Norma.