Pensaba que tercer episodio de Black Mirror iba a ser el que menos me gustara de esta segunda temporada, ya que a pesar de la carga de critica tecnológica que tiene la serie, lo más importante su argumento suelen ser las personas que interactúan con las nuevas tecnologías, y aunque «The Waldo Moment» tenga como protagonista a una especie de dibujo animado con forma de oso azul, casi un avatar del actor que lo interpreta, hay que admitir que es uno de los capítulos mas humanos de la serie.
¿Por qué? Pues porque profundiza en problemas reales (la crisis política que sufrimos desde hace mucho tiempo) desde el punto de vista de una persona real (Jamie / Daniel Rigby), que como todos nosotros es presionado por otros para actuar y aceptar en una realidad que no nos gusta y que depende de nosotros para cambiar.
Una situación que pese a ser un poco surrealista, no sorprende a nadie |
En «The Waldo Moment» asistimos a un periodo de elecciones de un distrito británico cuando un personaje animado de un late show consigue elevar su popularidad a costa de increpar a uno de los candidatos del distrito. Pese a no estar especialmente satisfecho con lo que hace, el humorista que interpreta a Waldo (el oso azul) acaba entrando en un juego político que lo llevara a convertirse en un candidato firme, y como ocurriera en nuestro país con «el caso Chikilicuatre«, lo que empezó siendo una forma de atraer más audiencia a un programa, acaba siendo un ejemplo de que la gente esta realimente harta del sistema y es capaz de votar a cualquier cosa para castigar la sociedad actual.
A la izquierda los candidatos, en el centro Waldo, y a la derecha Jamie y su asesora en todo este lio |
Aunque le falta el toque de dramatismo de los anteriores capítulos (algo que se soluciona justo antes de los créditos), este episodio me ha parecido bastante instructivo, ya que a muchos (aquellos que parecen ajenos a este mundo) les mostrara que las personas que tienen en su mano realizar cambios, se ciernen muchas veces a sus necesidades por encima de los intereses de la mayoría, cayendo en las manos de ese «colectivo mundial» empeñado en mover los hilos, que al final reduce cualquier oportunidad de un cambio real a lo mismo: oportunidades de negocio para los de siempre.
Sin duda otra historia que nadie debería perderse.
2 respuestas
Black mirror es una de las que tenemos pendiente (desde la pirmera temporada) para cuando terminemos Entourage.
@al rico libro: ya la estan echando en España… asi que daos prisa… merece mucho la pena