SEFF 2015. Secuencia 12: Juan Sebastián Bollaín tuvo que ser

Curiosidad de las curiosuras. Sevilla surrealista. Sevilla utópica o distópica. Sevilla desde los ojos de un arquitecto-urbanista-cineasta profético donde los haya. Juan Sebastián Bollaín. Enamorado de Sevilla y, por ello, crítico despiadado e inventor de una ciudad a la que el tiempo acabará dando la razón. Lo que Bollaín imaginó en los setenta, el siglo XXI lo ha llevado a cabo sin saberlo. Ahora nosotros lo vemos con la conciencia de estarlo viviendo. A esto hemos llegado. Y en fondo, hay que reírse. Porque reírse de uno mismo es la mayor de las sabidurías. Bollaín es Sevilla. Por eso puede reírse de ella. Nosotros, sevillanos, podemos reírnos con él y sus ocurrencias.

VOZ DE MI CONCIENCIA

Unas ocurrencias dignas del Dalí más esperpéntico. Rascacielos fálicos. Algunos dirían que es cosa de Freud. Yo digo que la Torre Pelli es tan macho como estos edificios pornográficos de Bollaín. Solo hace falta mirar hacia arriba para verle el glande…que diga lo grande, ejem, que es.

OJO IZQUIERDO

(Feliz como una perdiz surrealista)

Pues a mí me han encantado los monumentos a las cosas cotidianas. Me encanta ese de a qué bien me lo pasé aquel día en esta plaza. Buenísimo.

VOZ DE MI CONCIENCIA

Surrealismo, dadaísmo y pop art. Falta el urinario de Duchamp. Más de una esquina de la ciudad se merecería uno ¿Por qué no? Monumento a los efectos de la botellona en la vejiga.

OJO DERECHO

¿Pues sabes que es lo que más me ha llamado a mí al atención? Cómo adelanta todo eso de las redes sociales, los reality shows, la pérdida de la privacidad…

VOZ DE MI CONCIENCIA

Muy observador, sí señor. Los carteles con “sucesos de la vida de la ciudad y sus habitantes, “acontecimientos íntimos”, carteles donde “todo aquel que quiera expresa libremente su vida”. ¿Quién dijo facebook, instagram…?

OJO DERECHO

Y no te olvides de Las Dos Orillas. Me acuerdo perfectamente de la frase que le decían los del bar a Simón por su invento: “Te has cargado la diferencia que hay entre realidad y televisión”. Y eso era en 1986. Luego vendrían los Andalucía Directo y los Gran Hermano y compañía.

VOZ DE MI CONCIENCIA

Ni las profecías de Nostradamus. ¡Qué miedo!

Recientemente restauradas: Sevilla tuvo que ser (1979), Sevilla rota (1979), Sevilla en tres niveles (1979), La Alameda (1978), C.A7.9. Un Enigma de Futuro (1979), Sevilla 2030 (2003) y Las Dos Orillas (1986). Todo esto, más un recorrido en autobús por la Sevilla que imaginó Bollaín, con el mismo Bollaín a bordo. Una retrospectiva completa. En la sala y en la carretera. En dos, tres y cuatro dimensiones, si contamos como cuarta la imaginación y el sentido crítico. Si nunca has visto a Bollaín, es que nunca has visto Sevilla.

VOZ DE MI CONCIENCIA

A este hombre no se le escapa nada. Además de poder disfrutar de una Sevilla que ya no existe (por edad o por olvido, ya nadie se acuerda de Sevilla antes de las obras del 92), podemos tomar conciencia de cómo estamos tratando nuestra casa, dónde hemos llegado con esa actitud y hacia dónde vamos. Cuánta razón y cuantas risas. Debería ser de visionado obligatorio para los sevillanos. Bueno, y para todos los que les guste el cine.

OJO IZQUIERDO

¡Me encanta! ¡Todo, todo y todo! ¿Por qué no hemos visto ésto antes? Todavía no me lo explico.

OJO DERECHO

Como dice el personaje de Simón en Las Dos Orillas: “La ciudad que más me gusta del mundo es Sevilla”.

OJO IZQUIERDO

En serio ¿Por qué no lo habíamos visto antes?